El trabajo Melting Memories, del artista multimedia Refik Anadol, combina pinturas de datos, proyecciones de luz y esculturas de datos aumentados para demostrar de forma visual cómo el cerebro recuerda los recuerdos. La instalación fue creada con una pared de LEDs de 16 x 20 pies y espuma rígida fresada CNC. En el trabajo, remolinos hirvientes se mueven a través de la superficie de la obra, pareciéndose a las olas del océano, flores que florecen y arena movediza.

Para generar los datos, Anadol realizó experimentos en el Laboratorio Neuroscape de la Universidad de California, San Francisco. Una declaración del artista describe el proceso técnico: «Anadol recoge datos sobre los mecanismos neuronales de control cognitivo de un EEG (electroencefalograma) que mide los cambios en la actividad de las ondas cerebrales y proporciona evidencia de cómo funciona el cerebro con el tiempo. Estos conjuntos de datos constituyen los bloques de construcción de los algoritmos únicos que el artista necesita para las estructuras visuales multidimensionales que se exhiben».

Anadol es un artista de los medios de comunicación y director que se especializa en arte de performance y que explora la intersección de la realidad física y digital. Nacido en Estambul, el artista reside ahora en Los Ángeles, donde es investigador visitante y profesor en el Departamento de Diseño de Artes Audiovisuales de la UCLA.

En el siguiente video puedes ver el fascinante resultado:

Vía: Colossal